viernes, 7 de enero de 2011

Y LOS REYES PASARON.....

dejaron sus regalos y se quedaron un ratillo a tomar café, mientras los camellos comian yerba frente al merendero y los Pajes Reales se echaban un cigarrito en la puerta del MIRADOR, porque por muy Paje Real que seas, aquí de la ley no te salva ni Davidoff. Como es habitual, cada 6 de Enero los Tres Reyes Magos visitan "El Sitio de Iris" y nos dejan los regalitos que tras los cafés, téses y roscones varios son repartidos y abiertos con gran regocijo y alboroto del personal. Pero antes de que ocurra todo esto.......desde muy tempranito aparecen los otros Reyes que prepararán las sabrosas y ricas viandas que horas más tarde seran degustadas por todos los invitados. Estos Reyes son los Reyes Magros (conocidos así for sus famosa receta de magras con chorizo). Desde temprana hora los Reyes Gasparguiñano y el Rey Baltarzak, preparan rodillo en mano y brocheta en el horno una variada coleccion de banderillas, déstos y pichorradicas (aquí hay que ser riojano, riojano y dejarse de pintxos y volovanes).
En proximas entradas ya citaré el Menu Degustacion Real que Sus Majestades prepararon para dicho día........y todo ello sin la ayuda del otro Rey, el Rey Melchor, que como todo el mundo sabe este Rey es muy campechano, muy humano, de trato afable, amigo de sus amigos (que por Logroño tiene muchos y muy buenos desde que hizo la mili en Artillería), buen conversardor y lo más importante, un Señor con todas las letras de los que se visten por los pies y luego no le entran los bombachos por culpa de las babuchas. Pues aquí el amigo Rey(el listo) estuvo de vinos por el Laurel mientras los otros Reyes (los pringadillos) estaban rellenando los curasanes y partiendo queso y membrillo.
Pero como estos Reyes son tan majos y tan dispuestos a todo....volverán el año que viene con nuevas banderillas y déstos (llamados asi, porque cuando vamos a un bar y queremos comer algo y no sabemos de que esta hecho decimos ponme désto), mientras al Melchor volveran a recogerlo a las 6 de la tarde todo borracho con la corona ladeada y la estola anudada a la cabeza en la esquina de Las Palmeras de regreso a sus paises de origen.
Que los Reyes sean buenos y los Principes de Beukelaer. Que por cierto también son muy buenos.